¿Cómo se lleva a cabo la personalización?



El texto de este post esta tomado de la intervención presentada en la presentación de la Estrategia para un Nuevo Modelo de Cuidados en la Comunidad: Un proceso de Desinstititucionalización. Madrid, 13 de junio de 2024


He de confesar que hablar de personalización me parece mucho más sencillo que incorporarla en nuestros servicios, organizaciones y prácticas profesionales. 

En ocasiones, cuando compartimos con colegas  como llevar a cabo la personalización, hemos pensado …”bueno,  en realidad esto ya lo hacemos”. Sin embargo,  cuando  nos ponemos manos a la obra y tratamos de llevarla  a la práctica  vamos tomando  conciencia de que claro que trabajamos (o lo hemos hecho)  para procurar  a  las personas la mejor vida posible, pero en la mayoria de los casos, sin ellas, sin su participación, sin incorporararlas de principio a fin en aquello que proponemos, sin considerar que  son agentes activos  en la identificación, diseño y desarrollo de sus cuidados o apoyos

 

CUIDAR, APOYAR DE MODO PERSONALIZADO  me parece por tanto un reto mayúsculo.

 

Se  trata de transitar del enfoque  asistencialista que nos ha dirigido en  los últimos 50 años centrado en instruir, intervenir, rehabilitar, o atender  a otro en el que se trata de ofrecer opciones – a cada persona las suyas- acompañar, escuchar, observar, respetar, debatir  y acordar. 

 Tenemos por delante, estamos ya,  en una larga ruta, jalonada de  aciertos y errores,  que estamos construyendo  de modo permanente y colectivo, y en la que no dejamos de afrontar dilemas cada día, desaprendiendo y  volviendo a aprender.

 Para este viaje se  necesitan muchos recursos. Uno de los fundamentales son  profesionales suficientes y también excelentes. Ello por muchas razones, pero sobre todo porque no hay  personalización  sin relación.

Ofrecer cuidados y apoyos lleva consigo crear relaciones de interdependencia en las que  interactúan los derechos, el bienestar y la autonomía  tanto de las personas que cuidan como las de las personas que reciben los apoyos y cuidados. 

No puede haber cuidados y apoyos buenos  si los profesionales que los dispensan no  son y  se sienten competentes y formados. Y además son  respetados, y reconocidos tanto en las relaciones en las que cuidan, en los entornos en las que estas se generan,  en las  sociedades a las que pertenecen y en las comunidades en las que viven. 




 NOTA.La foto que preside este post esta tomada del Programa Formativo Personalización de los Cuidados a personas en situación de dependencia. Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 y Escuela Andaluza de Salud Publica

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